La fiesta

No te gustan las cenas de pie,

en las que el reto parece ser

cazar al camarero que vuela con las bandejas

y las bebidas llegan calientes,

con el hielo deshecho o la cerveza sin espuma.

No te gustan los cócteles ni las recepciones,

ni siquiera estas cenas de empresa

o de "antiguos alumnos"

(¿cuál es la diferencia?)

donde el mundo es feliz

de haberse conocido

y está orgulloso

de las pelusas de su ombligo.

No te consuela el hecho de haberte acostado

-¡hace ya tanto tiempo!-

con más de media docena

de entre las diez mujeres

más guapas de la fiesta.

Estarías mejor en casa leyendo un libro.

O mirando algún concurso absurdo de la tele.

O paseando al perro o cortándote las uñas.

Estarías mejor en cualquier parte

donde tu soledad

no saltara a la vista.

Donde nadie supiera que a ti 
nadie te espera.

©Santiago Pérez Merlo

Escena de "El guateque", de Blake Edwards