por el pasillo a oscuras
y me asomo a mi propio dormitorio
y te contemplo así,
desnuda y extendida
con esa desnudez que vive en los pinceles
de todos los pintores y con esa
respiración tranquila
que habita todas las melodías.
Y me tumbo a tu lado
y te beso despacio en los labios, allí
donde se acaba el mundo
y empieza el infinito
y me duermo de nuevo dejando
que me acaricie el sueño.
Y me despierto
solo.
©Santiago Pérez Merlo
©Santiago Pérez Merlo
Precioso,Santiago. Que historia de amor/ desamor mas bonita. Aplausos, aplausos...
ResponderEliminar