No me acostumbro a escribir a mano.
Salen versos torcidos y deformes
como mi propia letra: endemoniados,
infantiles o ilegibles.
La pluma ha perdido su razón de ser.
El cuaderno es un objeto absurdo,
trasnochado, anacrónico.
O quizá se ha perdido la poesía
entre las teclas frías de un ordenador,
de un teléfono móvil.
O tal vez nunca hubo poesía.
Sólo el clic clic que percute
y ensucia la pantalla
como mi letra escrita ensucia
ahora este cuaderno,
tratando de robarle su letra a la poesía.
tratando de robarle su letra a la poesía.
Es la letra...que escribe la poesia..que alegra el corazón..!!Gracias Sr.Merlo 🌷
ResponderEliminarUsted porque la lee aquí... si viera esos cuadernos no diría tanto 😅😅
EliminarGracias a usted, una vez más.