Epílogo para un blog

Es mentira: escribir
no alivia ninguna pena.
Y leer penas de otros 
sólo enciende el silencio 
de las propias palabras.
Nos han engañado 
con novelas, con diarios,
con las frases pretenciosas,
con los aforismos 
y con los versos hechos para enamorar...
sobre todo con esos.
Es todo mentira.
El dolor no tiene palabras.
El amor, tampoco.
Se siente. No se dice. 
Y, sin embargo, callar también es solamente 
otra forma de morir. 

2 comentarios: