Me acostumbré a dormir desnudo,
sobre todo de cintura para abajo
porque en las vueltas del sueño
y del insomnio,
de los malditos (benditos) ronquidos
encontraba el calor de otra piel.
sobre todo de cintura para abajo
porque en las vueltas del sueño
y del insomnio,
de los malditos (benditos) ronquidos
encontraba el calor de otra piel.
Ahora sigo así: desnudo,
con el pijama tirado
a un lado de la cama.
Pero estoy solo.
Y tengo frío.
Y tengo frío.
Bonito, aunque algo triste, poema. La imagen del pijama en el suelo y de la persona sola en la cama, sin el calor de la otra piel, toca de lleno el corazón. No se puede expresar mejor y con palabras tan sencillas.. Eso solo lo saben hacer los buenos poetas 🌼🌼🌼
ResponderEliminarMuchas gracias, Gimm. Seguro que sí se puede expresar mejor…. Pero yo doy lo que tengo 🤗😘
EliminarEs un poema precioso que describe un momento.Doloroso y triste...pero un momento en su vida. ¿Y la esperanza?
ResponderEliminarLa esperanza, aunque haya sido la última como dice el dicho, se ha perdido… O estará Por ahí bailando chachachá, como dice la
EliminarCanción 😉😘