Mariano

Me ha costado pero voy
asimilando tu adiós 
y te veo marchar 
moviéndote despacio,
el cuerpo acompasado 
de los pies al inmortal sombrero,
a medio camino 
entre el dandy y el bohemio.
Tu chaqueta gastada y los zapatos
que apenas te sostienen.
Y tu mirada azul por la que escapan
los versos que los ojos capturaron a su vez.
Tu corazón enorme, tu bondad,
-“en el buen sentido de la palabra bueno”-.
Ya te han dicho muchas veces adiós
y te han dado los abrazos que antes te negaron.
El mío me lo guardo.
Ya no te lo daré 
porque tú y yo sabemos
que no hay más vida que esta:
esa a la que arrancamos
alguna confidencia, algún poema
y un puñado de risas.
La vida que abandonas,
la muerte que te acoge
y se cala tu sombrero.
La muerte que nos dejas,
la vida un poco menos vida, hoy,
la cabeza desnuda. 

4 comentarios:

  1. Precioso, emotivo poema a un amigo...Ojalá y no hubiera que haberlo escrito. 😪😪😪

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  2. Maravilloso poema !! Cuando me vaya...quiero uno,si es posible.Solo la amistad es capaz de decir tanto,en tan poco espacio...🌹🌹🌹🌹

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  3. Uf!!! Queda mucho para eso... y muchas gracias. 🌼🌼🌼🌼

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